Podcast de Tejido 41

Recuerdo cuando nos confinaron y de un día para el otro tuve que cambiar toda la dinámica en casa y adaptarme de buenas a primeras a la nueva realidad.

De repente me vi encerrada con Teo y Lui (mis dos hijos) y con muchísimo tiempo para poder dedicarle a lo que tanto había soñado, crear mi propia Escuela Online de Tejido.

En mi casa, yo tenía una habitación destinada a taller y oficina, donde tenía todo muy organizado, tenía…

El día 1 de confinamiento, me llevé el escritorio con el ordenador al salón, para poder trabajar sin perder de vista a los peques y dedicarle el tiempo que hiciera falta a mi proyecto online.

Así fue que el bendito taller se fue convirtiendo poco a poco en trastero… simplemente iba metiendo cosas allí, sin ton ni son, hasta que llegó un momento en el cual casi no se podía entrar, «el impenetrable» como lo llama mi amiga Laura de @kaialanas, jajaja!

Después de dos años, decidí entrar con ojo organizador y corazón de Marie Kuondo. 

Comencé a sacar cosas, a decidir qué se queda, qué se va (la mayoría), qué es lo que voy a donar, qué es lo que voy a guardar para un proyecto que me gustaría realizar en mi pueblo y por supuesto qué es lo que voy a vender en un destash primaveral.

Espero en un futuro muy próximo poder conectarme contigo desde el taller y hacer un tour virtual para enseñarte cómo va quedando. 

Hoy no puedo hacerlo, porque estoy esperando que vengan unas amigas y me quiten un par de estanterías que sobran, seguramente ellas les darán un mejor uso y está todo patas arriba aún.

¿Tienes tu propio espacio de desconexión y disfrute?

Muchas gracias por compartir, por dejarme un comentario y construir una comunidad tan bonita.

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